CEAT Castilla-La Mancha, la organización más representativa de autónomos en nuestra región, integrada en CECAM CEOE-CEPYME Castilla-La Mancha, considera que el Acuerdo social y Económico alcanzado entre el Gobierno, las organizaciones empresariales CEOE y CEPYME y los sindicatos UGT y CCOO, es un primer paso en la línea de reformas estructurales que la economía española necesita.
En concreto, en materia de políticas activas de empleo, CEAT Castilla-La Mancha valora especialmente la bonificación del 100 por ciento en las cuotas a la Seguridad Social dirigida a la contratación de jóvenes de hasta 30 años y parados de larga duración, dentro del Plan de choque contemplado en el Acuerdo.
Con respecto a la equiparación de las bases de cotización, aún pensando que pudiera ser positiva, la Federación pide que esa equiparación se haga con cautela, teniendo siempre presente la situación económica del país, no solamente en el momento actual, sino también en un futuro; hay autónomos a los que les resulta difícil pagar mes a mes su cuota, por lo que un incremento en la actualidad supondría otro escollo más que se sumaría a la complicada situación que vivimos.
Otro aspecto a destacar de forma positiva es que se establezcan criterios de colaboración entre el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) y las Mutuas, con el objetivo de controlar más eficazmente las bajas laborales de duración inferior a 15 días.
Por otro lado, estamos esperanzados en que la futura Reforma de la Negociación Colectiva se haga dentro de un marco que contemple la situación real de las pymes y autónomos de nuestra región, que en muchos casos se ven afectados por unos convenios colectivos de ámbito nacional, que les perjudican, al trasladar situaciones que no son equiparables de unos territorios a otros.
CEAT destaca, asimismo, el mensaje de confianza que contribuye a transmitir a los ciudadanos y a los mercados, y considera que este Acuerdo contribuirá a la mejora de la imagen de España en el exterior y de nuestra capacidad para superar la crisis y trasladará un mensaje de tranquilidad a los mercados financieros, lo que a su vez redundará en una mayor disponibilidad de financiación para las empresas, algo que resulta especialmente beneficioso para las pymes y los empresarios autónomos.