Según los datos hechos públicos hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el Índice de Precios al Consumo (IPC) subió en marzo un 0,3 por ciento en Castilla-La Mancha en relación con el mes de febrero, situándose la tasa interanual en el 2,2 por ciento, cuatro décimas menos que la tasa interanual del mes anterior, motivado en gran medida por la reducción de los precios de los carburantes.
A nivel nacional, la tasa interanual desciende hasta el 2,4 por ciento, con una variación mensual de un 0,4 por ciento respecto a febrero.
Ante estos datos, cabe señalar que estos incrementos se producen debido a factores exógenos, y no guardan relación con una recuperación real de nuestra economía. Así lo muestra el Índice de Precios de Consumo Armonizado a Impuestos Constantes (IPCA-IC), que indica la evolución de los precios descontando el efecto de los cambios impositivos. Este indicador en el mes de marzo ha registrado un incremento anual de tan solo el 0,4 por ciento. O lo que es lo mismo, un 83% de este aumento anual del IPC, que se sitúa en el 2,4%, se debe a figuras impositivas, que nada tienen que ver con la actividad económica.
CECAM insiste en que las pequeñas y medianas empresas siguen atravesando un momento crítico, como reflejan estos datos. Para afrontar esta situación, como viene reclamando la Confederación desde hace mucho tiempo, es necesario que se restituya la liquidez del sistema, de tal forma que vuelva a fluir el crédito a las pequeñas y medianas empresas. Mientras esto no suceda, no será posible retomar la senda del crecimiento económico a los niveles precisos para favorecer la creación de empleo y la recuperación de nuestra economía.