Las horas de trabajo perdidas en Castilla-La Mancha en el primer semestre del año ascendieron a 57.838, como consecuencia de las 25 huelgas contabilizadas y notificadas a la autoridad competente en la materia en cada una de las cinco provincias, que afectaron a empresas y sectores en las que han participado un total de 1.444 trabajadores, según los datos facilitados a la Confederación Regional de Empresarios de Castilla-La Mancha la CEOE, en la que CECAM CEOE-CEPYME está integrada.
Durante este período, la región se ha situado entre las Comunidades Autónomas con un importante número de conflictos laborales. El número de huelgas registradas en Castilla-La Mancha ha sido de veinticinco que distribuidas por provincias sería: dos en Albacete, cuatro en Ciudad Real, dos en Cuenca, ocho en Guadalajara y nueve en Toledo.
Respecto al mismo período de 2010 la suma de trabajadores implicados ha aumentado en un 57 por ciento y las horas de trabajo perdidas en un 27 por ciento. En lo que respecta al número de huelgas, se ha visto levemente aumentado, ya que en los seis primeros meses del pasado ejercicio se habían producido veintiuna huelgas.
En una distribución por provincias, en las dos conflictos laborales producidos en Albacete, se vieron implicados 57 trabajadores, lo que conllevó una pérdida de 1.216 horas; en las cuatro llevadas a cabo en Ciudad Real, fueron 136 los trabajadores implicados y 12.576 las horas perdidas, y en las dos de Cuenca fueron 936 las horas perdidas y 44 los trabajadores implicados. Mientras, en las ocho producidas en Guadalajara y en las nueve de Toledo, los trabajadores implicados han sido 419 y 788 y las horas perdidas 31.552 y 8.212 respectivamente.
Por meses, globalmente consideradas las huelgas en la Región, abril destaca sobre el resto de las mensualidades, con 12 huelgas, 228 trabajadores implicados y 13.136 horas de trabajo perdidas.
Para la Confederación Regional de Empresarios de Castilla-La Mancha (CECAM CEOE-CEPYME Castilla-La Mancha) estos datos, que continúan siendo fruto de la situación de crisis económica que se está viviendo, no son nada positivos, y constituyen un freno en el desarrollo y crecimiento económico de la región.